El mejor fichaje de la historia del Valencia con cada vez más distancia

La figura del director general sale más reforzada que nunca porque reconoce sus propios límites, y acepta el lugar en el que está

Toni Hernández | 16 AGO. 2019 | 00:01
Mateo Alemany

El mejor fichaje de la historia del Valencia con cada vez más distancia se llama Mateo Alemany, aunque la figura del director general del club va a empezar a ser incómoda para muchos desde ya mismo. Y es que ese paso adelante se fragua desde el momento en el que tiene claro sus límites, acepta y entiende que hay un accionista mayoritario como él lo llama, que técnicamente es así, pero que a los efectos prácticos es un propietario en toda regla, y entiende como lícito que quiere estar más presente en la planificación deportiva de la entidad. Se posiciona del lado de su empresa, como debe hacer todo trabajador, hablando abiertamente de lo que es una situación evidente, sin quitar hierro al asunto porque realmente es algo normal, muy normal.

La puesta en escena que tiene puede con todo, porque no elude preguntas, te lleva a su terreno, por supuesto, pero no huye cuando el tema se complica. Y te dice la verdad, pero hay veces que la verdad no viene bien, porque con matices o un poco distinta ayuda un poco más a lo que se busca o se quiere. Manda Lim en su club, pues claro que sí, y él y Marcelino tienen toda la confianza del dueño, también claro, pero eso no es bueno cuando se le quieren dar palos al de Singapur. Alemany es un lujo brutal, por su gestión y por la venta de esa gestión, que nadie lo olvide.