Mateo Alemany, y tu lo sabes, la autonomía absoluta, cuando no eres el dueño, no existe, ni aquí ni en Singapur

Mateo Alemany no puede exigir un imposible a Peter Lim en el Valencia: tener autonomía total en todas las decisiones deportivas del club. En una empresa con un dueño, que paga las nóminas, exigir tal cosa no tiene sentido, porque se sabe de antemano que es algo que no va a pasar. Y de hecho hasta ahora no ocurriría tampoco en el Valencia, porque las decisiones, todas, siempre dependían del OK total de la propiedad, y las cuestiones vitales y estratégicas siempre se han tratado, y aprobado o no, en Singapur. Lo que ha pasado entre el directo general y el dueño es algo que sólo ellos pueden explicar, y que a veces parece un calentón, porque no se ha ejecutado, otras algo mucho mas profundo, porque esto no pasa por dos fichajes que vengan o dejen de venir, y finalmente parece que haya algo oscuro detrás de todo.

Si Alemany va sólo con la premisa de que tener esa autonomía absoluta o nada, lo normal es que a su vuelta esto sea un polvorón y estalle, porque se ha dividido al valencianismo, la gran mayoría del lado del director general, la plantilla ha tomado partido, se han filtrado muchas cosas en la boca de Marcelino García Toral… se ha ido en definitiva demasiado lejos en esta historia, y todos los actores saben que deben cerrarla y no en falso, sino con todos volviendo a su trabajo, al menos hasta el 30 de junio. Tengo a Alemany por un tipo listo e inteligente, y si va a Singapur sólo con ese pensamiento, me estará dando a entender algo muy distinto a querer quedarse en el Valencia. Ah, y yo soy de los que quiere que se quede y firmo con sangre que es el mejor fichaje del club en décadas.