¿El Valencia debe renovar a juveniles a precio de jugadores contrastados?

El tema de Ferran Torres es el último capítulo de esta historia, que ha tenido otros anteriores, y no siempre acabaron bien

Toni Hernández | 05 OCT. 2017 | 07:30

El Valencia tiene un problema llamado Ferran Torres, y la solución no es nada fácil. Y tampoco es un hecho aislado en la historia reciente del club, porque hay casos de todo tipo, que han acabado bien y mal, con los jugadores en la casa y fuera, triunfando y fracasando. Todos eran apuesta seguras, por supuesto, faltaría más, pero como siguen siendo apuestas, no todos los finales fueron felices. Pedro Chirivella se marchó al Liverpool, y no jugó allí. Sigue su carrera en Holanda, en equipos menores, y ya lleva dos años. En su día, cuando se marchó, esto fue un drama, y cundió el pánico. Lo mismo que cuando se dijo que Madrid y Barcelona venían a por Alberto Tendillo o Fran Villalba, uno en el Levante B en Tercera y otro en el filial sin dar el salto ni ser titular indiscutible. Chirivella no se quedó, los otros si, y aunque a Fran le queda margen, todos salieron mal.

Carlos Soler es la parte positiva, porque también lo quería medio mundo, se quedó, y ahora es el emblema. Pero a los 17 años, ¿es posible que se pueda saber a ciencia cierta quién si y quién no? No, no es posible, ya me contesto yo, pero ahora el Valencia se vuelve a encontrar con el "marrón": apuesto por el chaval, que es juvenil, y le pago como a un jugador hecho, o lo dejo marchar por 8 millones de euros, 25 si lo subo al primer equipo, y en 3 años que esté con la selección tipo Isco, que es otro caso similar aunque con muchos más matices. Y nadie va a ayudar, me temo.