La cuarta copa del Valencia CF 50 años después

Hoy se cumple medio siglo del cuarto título de copa conquistado por el Valencia CF en su historia. Los jugadores de Mundo ganaron al Athletic en Madrid

Jose Hernández | 02 JUL. 2017 | 08:59

Hoy se cumplen 50 años del cuarto título de copa conquistado por el Valencia CF en su historia, el 2 de julio de 1967 el conjunto entrenado por Mundo venció al Athletic (entonces Club Atlético de Bilbao) por dos goles a uno. El recibimiento posterior en la ciudad fue apoteósico.

Cuando Athletic Club y Valencia se vieron las caras en la Europa League hace poco más de un año, muchos recordaron el duelo copero de 1967. A pesar de tratarse de dos gigantes del fútbol español, ambos conjuntos no habían vuelto a jugar frente a frente en un torneo oficial que no fuera la liga desde 49 años atrás. Y es que aquella final del Santiago Bernabeu vivida en los sesenta permitió a la masa social de los dos clubes mostrar su sensacional poder de convocatoria; Madrid se llenó de seguidores vascos y valencianos en una de las finales con más color en las gradas durante la época. Aquel Valencia comenzó la temporada 1966-67 como un ciclón. Líder del campeonato en el primer tercio de la liga y brillante en europa, el equipo de Mundo rentabilizaba a la perfección los goles de Waldo (pichichi de la liga aquel año) y la frescura aportada por un joven Claramunt que se asomaba con fuerza en el primer equipo. Sin embargo las cosas se torcieron y el conjunto de Mestalla cedió terreno para finalizar en sexta posición.

El camino valencianista en la copa arrancó el primero de Mayo de 1967 en el estadio Ramón de Carranza, una trayectoria que tendría su colofón dos meses más tarde con la conquista del título ante el Athletic. Los bilbaínos habían perdido parte de su fuerza de antaño y llegaron a aquel encuentro casi tan necesitados como el Valencia (llevaban casi una década sin conquistar la copa, el Valencia trece años). En la memoria permanecían las finales entre ambos de los años cuarenta o el legendario partido interminable de la semifinal de 1950. Era una final de históricos, de conjuntos broncos y coperos con aficiones entregadas a la causa. Los jugadores valencianistas, concentrados en el hotel Victoria Palace de San Lorenzo del Escorial, eran conscientes de que podían firmar una página para la historia.


Waldo, Mestre, Guillot, Roberto y Jara, paseando en la previa de la final

UN CAMINO MERITORIO HACIA EL TÍTULO

Tras dejar en la cuneta a Cádiz y Real Betis, el Valencia tuvo que verse las caras nada menos que con el Real Madrid, El conjunto entrenado por Miguel Muñoz (campeón de europa un año antes) cayó derrotado en Mestalla 2-1 después de que el Valencia lograra una merecida remontada. En la vuelta se esperaba el asedio de los locales, y por ello Mundo planteó un encuentro de contención intentando aprovechar la velocidad de Claramunt, Poli o Guillot en la salida. El Valencia (vestido con camiseta roja y calzón negro) puso en aprietos al Madrid. Como suele ocurrir en estos duelos el árbitro también fue protagonista y señaló un penalti a favor de los locales que pudo desequilibrar la balanza; Ortiz de Mendíbil fue muy criticado por la expedición valencianista aunque en esta jugada Abelardo estuvo más acertado que Gento y logró parar la pena máxima.

Ya en las postrimerías del encuentro se produjo el gol definitivo. Waldo lanzó una falta y Junquera envió a corner. Se lanzó el saque de esquina y el propio delantero brasileño cabeceó de forma inapelable a la red silenciando el coliseo blanco. El 0-1 colocaba al Valencia muy cerca de la final y por supuesto hizo que la euforia se desatara en el regreso del equipo. Además y como hecho curioso, hay que señalar que los jugadores valencianistas recibieron una suculenta prima por parte de la directiva. Según la prensa de la época, la más alta que nunca había pagado la entidad a sus jugadores (30.000 pesetas por futbolista)

*Diario Marca (12-6-1967)

En semifinales se batió al Elche mientras que el Atlético de Bilbao se impuso con facilidad al Córdoba. Tan solo quedaba superar a los leones en Madrid para lograr la copa trece años después. "La final está al cincuenta por ciento de posibilidades, buscaremos goles pero con el portero vasco no será fácil lograrlos" declaró Mundo en la previa. El guardameta rojiblanco no era otro que Iríbar, un joven de 24 años convertido ya en estrella gracias a sus portentosas actuaciones con su equipo y la selección española. Pero si los bilbaínos tenían al "Txopo", el Valencia contaba con la fuerza en ataque de Waldo, el descaro de Claramunt o la jerarquía de Mestre. Los aficionados vascos vivieron un buen prólogo a la final con la conquista del título juvenil por parte de sus cachorros (en esta época este partido precedía a la final de la Copa del Generalísimo absoluta), el Athletic ganó al CF Damm. Pero el tema de las primas y los incentivos económicos no había quedado olvidado. En este editorial de la desaparecida "Gaceta del norte" se hablaba del suculento premio económico que esperaba a los valencianistas, nada menos que 75.000 pesetas por cabeza si ganaban la copa. Eso sí, en Bilbao eran claros: el Valencia tenía fondos para premiar a los campeones pero no entradas para satisfacer a los miles de aficionados que querían estar en el Santiago Bernabeu.


*La Gaceta del Norte (2-7-1967)

En medio de dos aficiones entregadas, sonido de tracas y movimiento de banderas comenzó el plato fuerte de la tarde. El Valencia ganó el partido con brillantez y solvencia pese a lo ajustado del marcador. Fue superior. Brillaron Paquito y Claramunt en la primera parte aunque fue Jara quien inauguró el marcador justo antes del descanso. Paquito marcó el gol de la tranquilidad en el 55 y poco después Uriarte volvía a meter a los de Gaínza en el encuentro. El Valencia tuvo ocasiones para cerrar la final pero los vascos tiraron de su orgullo característico para intentar forzar la prórroga, primero con una acción de Argoitia, después con un cabezazo de Arieta que Abelardo despejó y finalmente con una ocasión de Rojo en la que un acertado Sol evitó el empate.


El Valencia ganó la copa y el júbilo se desató tanto en Chamartín como en toda la provincia de Valencia. El recibimiento en la Plaza de la Vírgen, la Plaza del Caudillo y por supuesto en Mestalla fue apoteósico. El Valencia volvía a ser campeón y con ello además se aseguraba su participación en la Recopa de Europa. Abelardo; Sol, Mestre, Tatono, Paquito, Roberto Gil, Poli, Guillot, Waldo, Claramunt y Jara fueron los héroes del valencianismo tal día como hoy hace medio siglo.