El Valencia busca fichar un entrenador: otra cosa no tendría sentido

La confianza en Voro ni es mayor ni es menor, pero sin un director de orquesta como toca, el equipo está peor aún de lo que parece

Toni Hernández | 04 ENE. 2017 | 00:03

"No estoy buscando entrenador porque nadie me ha dicho que lo haga", dijo Jesús García Pitarch cuando salió ante los medios tras la dimisión de Prandelli, y eso sí es un acto de irresponsabilidad manifiesta, y es que Voro será un parche, una transición, pero no es el entrenador que ahora necesita el equipo para enderezar la nave con todos los partidos que quedan por delante, y obviamente, de la Copa ya no estoy hablando. El Valencia necesita firmar un entrenador, UN ENTRENADOR, al que se convenza de que esto no es una casa de señoras de moral distraída sin dueño, sino un club de fútbol casi centenario, que ha sido el mejor del mundo, y que quiere volver a serlo. Y que por supuesto, tiene dueño y no le importa todo un carajo.

Si el Valencia no tiene un entrenador antes de volver a Mestalla, porque a Osasuna no llega y allí le va la vida a este club, tendremos un problema muy gordo, y no me creo que Suso no lo piense, no me lo creo ni borracho, porque eso lo ve un ciego deportivo, y aquí podemos estar tontos o muy tontos, pero ciegos a ese nivel no. Voro es lo que es, una leyenda engordada por las circunstancias, y no es más. Y esto no es hablar ni bien ni mal, es decir lo que hay. Un entrenadfor que quiere venir al Valencia, que sepa lo que esto y que esté lo suficiente loco por aceptar y cuerdo para sacarlo adelante.