El Valencia no tendrá gol hasta enero: a sufrir como perros para ganar cada punto, no hay más

Se puede ser más sutil, seguro, pero al pan, pan, y a la falta de gol lo que se debe poner para llegar al barón navideño lo más vivos posibl

Toni Hernández | 21 NOV. 2016 | 00:02

El Valencia no le mete un gol al arco iris, le cuesta un mundo al equipo de Cesare Prandelli, y por desgracia no es una opinión en caliente, sino un hecho contrastable, que es incluso menos duro que los goles encajados, porque el hecho de que el equipo deje la portería a cero se ha convertido en una especie de quimera que no se cree nadie. Y por más que trabaje el italiano en todos los aspectos, que lo hace, lo cierto es que sin gol no hay paraíso, y el Valencia está lejos de él. Ahora mismo sería más importante, y mucho más posible, insistir en cerrar tu marco en cada encuentro que tratar de buscar la meta rival. Porque está claro, suena duro, pero es lo que hay, por mucho que nos duela o nos pueda sentar mal a todos.

Hasta que Jesús García Pitarch no cierre el fichaje de un delantero centro, incluso de un banda ofensivo, y por supuesto de un medio centro defensivo (algo que muchos pedimos a gritos en verano, pero es que ahí íbamos sobrados con Enzo Pérez y otras peras estivales), el equipo no va a mejorar lo que debe, lo que se espera y lo que necesita. ¿Que Suso es un inútil y un pelota? Pues hombre, todo extremo es malo, exagerado, e implica cierta injusticia, y más cuando la valoración de todo un trabajo se centra en dos cuestiones puntuales, que sí, son dos meteduras de pata como una catedral, pero que "sólo" son parte del trabajo de un director deportivo (que es la nueva profesión que todo el mundo sabe ejercer después de la de entrenador, por cierto).