No quememos ya la falla de Nuno

La afición del Valencia Club de Fútbol está muy quemada tras una semana muy triste en la que su equipo ha perdido 2-3 ante el Zenit de San Petersburgo y ha empatado 0-0 ante un Real Betis con diez jugadores sobre el césped durante 43 minutos. El Valencia CF tiene ahora mismo 6 puntos tras haber cosechado tres empates y una victoria in extremis ante el Sporting de Gijón. Es obvio que las cosas no se están haciendo del todo bien, pero tampoco quememos la falla antes de acabarla ya que hay otras cosas que sí se están haciendo bien.

¿Por qué está quemada la afición y con quién?

El grito de 'Nuno vete ya' se escuchó en Mestalla en un par de ocasiones por primera vez desde que el técnico luso cogiese al equipo en el verano de 2014. Eso ya es significativo de la que la afición tiene un culpable que tenía muchas papeletas por lo extradeportivo. La salida de Amadeo Salvo y Rufete colocaron a Nuno como el enemigo número uno en este sentido y la afición lo demostró con esa pitada en la presentación. Nuno no contaba con iniciar la temporada de esta forma y eso es lo que ha provocado el 'Nuno vete ya' a estas alturas. Es realmente pronto y más para un entrenador que la temporada pasada logró esos 77 puntos.

No quememos ya la falla, pero sí encendamos algún petardo que otro. Me explico. Nuno no está logrando acertar con los cambios/rotaciones, estrategias y tampoco con las convocatorias. Al entrenador luso se ve algo perdido a la hora de colocar a los futbolistas ya que realiza ciertos inventos como, por ejemplo, mover a Rodrigo Moreno cada semana de posición o colocar a Santi Mina en faceta de extremo. Esto sí son errores que provocan que el equipo no carbure como debiera y además genera dudas en futbolistas que la temporada pasada mostraron un gran nivel. Hay que aprovechar a los jugadores donde rindan para lograr mejores resultados.

Por comentar algo positivo, Nuno Espirito Santo acertó con el planteamiento inicial ante el Betis, pero erró en la toma de decisiones antes y durante el partido. Se dejó a Negredo en la grada, con lo que sus opciones de cambio en la delantera quedaron anuladas si el partido necesitaba altura. Al final Negredo se echó de menos puesto que el Valencia mandó muchísimos centros que nadie era capaz de rematar.

Queda mucho por mejorar, pero esto acaba de empezar, así que confiemos en estos jugadores y demos también un voto de confianza al entrenador. Ya habrá tiempo de quemar la falla si las cosas no funcionan en los próximos meses. Paciencia y a ganar al Espanyol.