Valverde paga la mala planificación de Braulio

La mala planificación de Braulio Vázquez está afectando directamente al rendimiento deportivo del equipo y a las posibilidades de clasificarse para la próxima Champions League. El domingo en San Mamés se lesionó Víctor Ruiz y ya no quedaba ningún central disponible de la primera plantilla. El txingurri tuvo que tirar de Albelda.

Ya desde principios del verano de 2012 se habló de que había que reforzar la zona central de la defensa, además de los dos laterales (Joao y Cissokho). Pasó el verano y el mercado de fichajes y Braulio decidió que la plantilla estaba bien cubierta con tres centrales en vez de cuatro, que venía siendo lo habitual en los últimos años. La plaga de lesiones y expulsiones no ha parado en todo el año y Pellegrino y Valverde lo sufrieron en sus carnes.

Los directores deportivos deben pensar siempre en las posibles lesiones o sanciones que puedan tener sus plantillas y en cómo llegarán a la parte final de la temporada. La intensidad necesaria para competir miércoles-domingo ha provocado lesiones en toda la zaga y la ha dejado en cuadro. Valverde tuvo que jugar con Mathieu y Ruiz ante el PSG y lo mismo ante el Athletic con la consecuente lesión de Ruiz al principio del partido y su recambio por Albelda. Esto tiene un nombre y no es otro que "Mala Planificación".

La lesión muscular de Víctor Ruiz es la enésima de una plantilla que no ha estado al 100% disponible en toda la temporada. Ahora que se había recuperado Jeremy Mathieu después de una eternidad va y se rompen los tres centrales del equipo. ¿Hacía o no hacía falta ese cuarto central, Braulio? Es evidente que hablar ahora es ventajista, pero es que ya se habló antes de empezar la temporada y durante la misma. Toca repartir responsabilidades por el rendimiento del equipo y el director deportivo no puede ser ajeno a ello.

Jorge Candel también ha tenido algo de culpa en ciertos momentos ya que con el tema de Mathieu se tardó una eternidad en recuperar al jugador con las dudas de sí operaban o no. Esto obligó a retrasar a Guardado al lateral tras confiar poco en Cissokho, otro de los posibles errores de Braulio. Desde luego que Aly no vale 6 millones de euros, eso ha quedado muy claro.

Sabemos que no lo hará, pero Manuel Llorente debería ponerle las pilas a Braulio para evitar que vuelva a darse una temporada como esta, es decir, llena de imprevistos no pensados cuando tocaba. Una vez más se ha demostrado que la plantilla es corta, sobre todo, en la zona defensiva. Reitero, cada uno que asuma sus propias responsabilidades. El objetivo de la Champions está más lejos tras caer a la séptima plaza de la clasificación. Toca remar más que nunca para levantar el ánimo y no volver a perder un partido como el del Athletic de Bilbao.