Sarao granota

Quico Catalán se despachó a gusto contra Lassad, al que acusó de jugar con la imagen del Levante y condenó a no vestir jamás su camiseta. Sin embargo, tal vez no contaba con que el exjugador del Deportivo que los granotas dieron por fichado durante unas horas no iba a estar callado. Desde Glasgow, y ya como futbolista del Celtic, ha contestado al presidente granota y vendido a su agente, Karim Aklil, en el punto de mira de todas las acusaciones y expuesto a una grave sanción de la FIFA. ¿Montaje o realidad? Lassad arremete contra Aklil y de cara al Levante la pose de ambos es haberse peleado. Sin embargo, en Orriols hay sospechas de que ambos están compinchados y de que Aklil estaba perfectamente al tanto de lo que ocurría.

"Karim es mi representante. Me llamó para decirme que el Levante estaba interesado y yo le dije que podía ser interesante y que quería saber qué me podía ofrecer. Después me comunicó una oferta y, al mismo tiempo, me llamó un agente inglés para comentarme el tema del Celtic. Entonces yo le indiqué a Karim que iba a elegir el Celtic y que no quería ir al Levante", ha declarado en una entrevista con 'Cope Valencia'.

"Karim me preguntó por qué me había ido al Celtic. Yo le respondí que nunca le había dicho que quisiera ir al Levante. Es él quien quería que fuera allí. Me dijo que era una muy buena opción y que tenía que firmar ahí. Yo le contesté que no. A lo mejor él pensaba que iba a aceptar y puso su palabra antes que la mía", afirmó el tunecino, que insistía: "Nunca le dije que sí. Me he marchado del Deportivo porque no quería renovar allí. ¿Creen que la oferta del Levante va a ser mejor que la del Dépor? No falto al respeto al Levante, pero el Dépor es mi casa, acabo de subir a Primera con el club, estoy muy a gusto allí. ¿Por qué me voy a ir del Dépor para ir al Levante?".

Lassad hubiese cobrado en el Levante entre 450.000 y 550.000 euros brutos por temporada, aunque lo cierto es que nunca supo nada de ese contrato ni tampoco va a saberlo, pues ha roto relaciones con Aklil, quien a su vez ha anunciado que piensa denunciarle. "¿Para qué me va a denunciar? Karim me llevaba pero no tengo ningún papel firmado con él. ¿A mí de qué manera me afecta si firma papeles por mí? Me ha montado un lío y por su culpa la gente tiene esta imagen de mí. Con Karim ya no tengo nada que ver. Ni le cojo el teléfono. Me faltó al respeto haciendo eso".

Lo cierto es que los niveles de estrés en Orriols son enormes. El desgaste de los últimos días ha hecho mella en el presidente, que el pasado domingo sufrió un desvanecimiento en el palco del Ciutat y requirió asistencia médica. Es el segundo susto que da durante un verano en el que ha acumulado mucha fatiga. El viernes acabó las negociaciones con Lassad y Martins a las 4:30 de la madrugada y por la mañana ya estaba en el entrenamiento del equipo en el Ciutat.

Al agotamiento físico se une, además, el castigo por los reveses sufridos. Y es que al margen del caso Lassad a estas alturas el Levante sigue sin delantero y fuera ya del mercado normal las posibilidades de futbolistas en paro son reducidas. Auténtico papelón encima de la mesa el de quedarse sin delantero para sustituir a Koné más allá de Gekas y Ángel, a todas luces dos respuestas insuficientes cuando si algo tienen claro los azulgranas es que sin gol el futuro en Primera puede ser tenebroso. Sin contar con Europa, donde ya es imposible inscribir a nadie para la fase de grupos. A estas alturas, el culebrón Martins prosigue. El club tiene un acuerdo con él por dos temporadas y otra opcional, pero pese a haber llegado a un pacto de rescisión con el Rubin Kazan, la disconformidad del nigeriano en una serie de pagos evitan que sea agente libre. Es decir, un problema añadido, pues burocráticamente los granotas no pueden firmarlo si la fecha de baja no es anterior al 31 de agosto.