El Atlético puja por Vicente Iborra

Decía Quico Catalán que no sólo le preocupan los clubes que acechan a Juan Ignacio y razones le sobran. La espectacular temporada del Levante ha puesto en el escaparate a varios de sus jugadores y los cantos de sirena empiezan a parecer gritos. Sobre todo los que se refieren a Vicente Iborra.

El rumor del Atlético de Madrid continúa cogiendo fuerza. Hace unas semanas, la presencia de José Luis Pérez Caminero en el palco del Ciutat de Valencia llamó la atención del club granota, con la mosca detrás de la oreja. El director deportivo colchonero venía a ver al canterano y a raíz de aquella visita incluso se ha especulado con una oferta formal por sus servicios.

Sin embargo, el Atlético no es el único equipo que le sigue la pista. Sevilla y Getafe también están al acecho, aunque por encima de todos destaca el Valencia. En el entorno del club de Mestalla los hay que están haciendo fuerza para que el de Montcada se convierta en el relevo generacional de Albelda. Son los mismos que años atrás se quedaron con las ganas cuando su fichaje para el filial estaba encarrilado o cuando tiempo después, con Fernando Gómez Colomer como cabeza visible, los che volvieron a la carga.

Iborra tiene contrato hasta 2014 y una cláusula de rescisión de 6 millones de euros ampliable a 9 si debuta con la selección absoluta. Sin embargo, detrás de estos fríos números hay un detalle oculto en el que está la clave de su posible salida. Su ficha aumenta cada año y en los dos últimos llega a un extremo en el que se dispara de la media salarial. De hecho, cuando el club lo blindó ya lo hizo con la idea de que acabaría traspasándolo para hacer caja.

Iborra ha vuelto por sus fueros en las últimas jornadas coincidiendo con la resurrección del equipo. En Cornellà recuperó la titularidad que había perdido a finales de 2011 y ya no la ha soltado. De hecho, vuelve a ser aquel centrocampista que a principios de curso llamó la atención de Vicente del Bosque, que pensó en probarlo en una convocatoria. Aunque su perfil no es el de los 'jugones', lo cierto es que ofrece unas variantes que el seleccionador no tiene en otros futbolistas.

En realidad, el Levante es consciente tanto de que el futuro de Iborra apunta lejos de Orriols como de que lo mismo ocurre con el de Xavi Torres. El de Xàbia ve con buenos ojos dar el salto y el club no descarta ejecutar su opción de 300.000 euros y llegar a un acuerdo fácil con él a cambio de facilitarle una salida. Y es que el Ciutat puede ver cómo este verano se produce una 'fuga de cerebros' con la pérdida de su doble pivote mágico. Algo que no pillaría de nuevas a Manolo Salvador, que está tirando la caña en busca de centrocampistas.

Con la renovación automática de Farinós todavía en el aire, ya que le faltan cuatro partidos, el panorama en la medular se hace desolador. El cuarto en discordia, Pallardó, no entra en los planes de los técnicos, pese a tener dos años más de contrato. Trabajo extra para la dirección deportiva.