La sombra de Villarroel

Quico emula viejas prácticas del exdueño

Rafa Carretero | 29 FEB. 2012 | 18:34

En tres años y medio, Quico Catalán había visitado la caseta bastantes veces, pero nunca estirado de las orejas a los jugadores en el vestuario ni viajado con ellos en el autocar para marcarlos de cerca. Un punto de inflexión respecto a la política del ‘laissez faire’ con la que se había querido poner tierra de por medio con Pedro Villarroel, propenso hasta a hacerle las alineaciones al míster de turno.

La preocupación motivó que la pasada fuera una semana de movimientos en la que el presidente dio un paso adelante y hasta movió hilos para que el viaje a Barcelona fuera por carretera un día antes del partido en lugar de en tren el mismo sábado. El nerviosismo cundía y el partido fue un examen para Juan Ignacio, cuya gestión del grupo parecía haberse puesto en entredicho.

Sin embargo, la dinámica del equipo cambió y, pasada la tempestad, el futuro se vuelve a ver con más calma. El objetivo ahora no pasa por Europa, sino por aprovechar el próximo mes de competición para finiquitar la permanencia y no volver a dormirse. Si alguien lo hace, Quico bajará para despertarlo.