La operación Guerra
Vacío de poder en el Valladolid
Como en una partida de cartas, el Levante esperará el mejor momento para sacar la suya y llevarse la partida por Javi Guerra. El club granota apuesta por una táctica de desgaste en la que los rivales por el 'Chupete' se vayan retirando. Los granotas creen que el mercado no está para muchos trotes y juegan con la baza a favor de que el delantero quiere continuar en España. A día de hoy no contempla irse a Rusia.
El Valladolid se encuentra en un vacío de poder que dificulta la negociación. Por eso el Levante va a esperar. Sabe que necesita hacer caja, pero también que no hay ofertas concretas por él y que con una deuda de 30 millones de euros contratos de Primera División como el de Javi pueden ser inasumibles.
El Levante ya está en contacto con el malagueño, que prefiere guardar silencio, y ha delegado su futuro en su agente, cuya relación con Quico Catalán, curiosamente, no es demasiado buena. El verano pasado el presidente consideró que la manera en la que se llevó a Javi al Valladolid fue una maniobra por la espalda. Ahora, sin embargo, los granotas han puesto el contador a cero. El objetivo, llevárselo con la carta de libertad y esforzarse en asumir su ficha.