A la tercera va la vencida
El submarino amarilo tiene una nueva ocasión de soñar con una final europea.
Dicen que a la tercera va la vencida y eso es precisamente lo que sueña toda la afición del Villarreal. Tras dos decepciones vividas en las dos únicas semifinales europeas que ha disputado el equipo amarillo, el fúbol le da una nueva oportunidad de estar en una gran cita europea.
Valencia y Arsenal fueron sus dos verdugos anteriores. Los primeros les ganaron la partido en Mestalla 1-0 con un penalti transformado por Mista. A partir de ese momento, se acabó la hermandad que reinaba entre ambos clubes.
Frente a los ingleses la historia fue todavía más cruel. El conjunto amarillo tenía al Arsenal contra las cuerdas y en el último suspiro del encuentro el árbitro señaló un penalti a favor de los locales. La estrella de los castellonenses, Riquelme, se dispuso a lanzar la pena máxima pero la presión le pudo en el momento más decisivo. El argentino falló, Lehmann paró y el Arsenal pasó a la final de la Champions.
Cinco años después y de la mano de Garrido el Villarreal tiene una nueva ocasión de hacer historia. El club ha crecido mucho en los últimos años y no estar en la final, pese a que desde el club se diga lo contrario, no sería una decepción si no que incluso se podría hablar de fracaso.