
Para poder cambiar el Valencia hace falta algo que, o no hay, o no se quiere poner: dinero
Queremos jugar a unos juegos para los que no estamos listos, y luego llegan los enfados y las decepciones, porque se inflan las expectativas
Queremos jugar a unos juegos para los que no estamos listos, y luego llegan los enfados y las decepciones, porque se inflan las expectativas
Sin la figura del máximo accionista y todo lo que conlleva, el foco para algunos desaparecería, y eso no lo van a poder soportar
Se vuelven a leer sesudos análisis que se dejan siempre lo básico, es decir, que no hay ninguna otra opción real por nuestra culpa
Van a llegar ventas, pero tras la reunión en Singapur es muy posible que se hayan fijado prioridades
Años de bravatas y generación de falsas expectativas para la gente, y la realidad es que las cosas eran de otra manera, siempre lo fueron
Que hay una especie de Síndrome de Estocolmo en el entorno es algo que tengo clarísimo, porque es muy evidente
Cuando se quiere sacar pecho por cosas que no tienen sentido, pasa que viene el toro y te da un meneo de máximo nivel
Todos los mensajes que llegan desde dentro apuntan en la misma dirección, pero claro, hace falta algo más que mensajes
Esa es la única cosa que de verdad importa en estos momentos, porque sin eso, todo lo demás está igual que hace unos meses
Seguimos insistiendo en presumir de algo que no tiene sentido, y claro, la gente se va dando cuenta de todo lo que se dice y se escribe