Empiezan a salir los manuales del buen valencianista, ahora, con el agua al cuello

Primero la destrucción total y luego pedir el apoyo incondicional, una forma de funcionar que odio y refleja una evolución cero en el periodismo valenciano

Toni Hernández | 13 DIC. 2016 | 00:04

"El próximo año irá a veros a Mestalla vuestra puta madre...!! Vuestra puta madre...y yo, como hago desde hace 34 años y seguiré haciendo", es un tuit del usuario @mestallidos, y simplemente es el reflejo del manual de verdad del buen aficionado valencianista, el que hace lo que siente, y eso incluye quemarlo todo aunque sea durante cinco minutos, porque desahogarse y tomar aire, primera parte de la frase, es básico para llevar a cabo la segunda, lo de ir con le señora madre a Mestalla. Las soflamas al aficionado serán ahora la tónica habitual, pedirle que llene el campo, que se sacrifique, que lo de todo por su equipo... QUE LA GENTE SABE PERFECTAMENTE LO QUE DEBE HACER, la gran mayoría, y no necesita que nadie le diga nada. Si soy sincero, me puse enfermo viendo el partido de Anoeta, pero ver lo de Paterna por la noche, por mucha bronca que se merecieran los jugadores, me da la misma vergüenza que ver al equipo. La gente es libre de decir lo que quiera, pero cuando se pasan ciertos límites, es intolerable. Por cierto, la voz que dentro del autobús pide que los arrolle, lamentable. Que lo diga, que lo grabe, y que algún fenómeno lo difunda, el pack completo.

Los que calentamos o enfriamos las cosas somos los periodistas, no nos volvamos locos. El aficionado, si su equipo gana, es feliz, y si no, se cabrea, ahora y en el siglo pasado, cuando el fútbol se vivía con transistor y ahora que todo nace y muere en las redes sociales. La calma y la pausa hay que tenerla siempre, SIEMPRE, y si vamos de populistas, el club va siempre por delante, mane quien mande, por muy mal que nos caiga. Ahora, Y SIEMPRE, hay que ayudar al Valencia, porque los periodistas debemos entender, si fuéramos largos y listos, que cuanto mejor le vaya al club, mejor nos irá a nosotros. ¿Que ahora mismo todo es un desastre? Claro que lo es, pero la calma y el compromiso no se pide después de quemarlo todo, sino con otras muchas cosas, que tampoco voy a citar, porque manuales de otras cosas tampoco doy.