Análisis del mercado de fichajes del Valencia
Sobre el papel, insuficiente y descorazonador por los nombres, aunque ahora toca analizar el rendimiento que pueda haber

El mercado de fichajes del Valencia se resumen en una inversión de 1.300.000 euros. Una llegada a coste cero, cesiones de descartes del Sevilla, Levante, Zaragoza, Clermont, un prometedor chico del Aston Villa, y el traspaso de un futbolista del Alavés. Eso más la vuelta de un canterano cedido en Segunda al Valladolid.
Con frialdad total y absoluta, ese es el mercado del equipo, a lo que hay que sumar la venta por 35 kilos de Mamardashvili, el despido de Castillejo el último día, y las salidas a préstamo de Cömert, Cenk y Hugo González. Si en el mes de junio nos lo dicen, tal que así, nos hubiéramos vuelto locos. Hacía falta un central de mucho nivel, prometido tras la salida de Paulista.
Extremos que aumentaran de forma notable la competitividad en ese puesto, mucho gol… A priori, que siempre es muy fácil, no se ha hecho nada de todo eso. Luego la pelota rodará y ya veremos, y eso no lo vamos a poder calibrar hasta después del parón, como poco. Pero que ahora mismo el entorno del Valencia esté tirándose las manos a la cabeza es algo bastante razonable, muy razonable, y que tengamos todos el miedo metido en el cuerpo, lo mismo.
Estamos más que nunca en las manos del Pipo y de su trabajo. Que haga de todos esos jugadores un bloque fuerte, como el año pasado, y que logre la mejor versión de cada uno de ellos. Seguro que los había mejores, totalmente seguro, pero dentro de la política deportiva de este club, de este máximo accionista, es lo que le han puesto a su disposición. Y aunque no demos crédito por muchas razones, debemos apoyarlos a muerte, no hay otra.