Entramos en mayo, y en el Valencia tenemos que decidir muchas cosas

1 de mayo y seguimos sin saber muchas cosas básicas del Valencia del año que viene. Seguimos sin saberlas nosotros, porque quiero pensar que dentro sí lo tienen claro, que eso sí sería para preocuparse. Y que lo tengan claro tampoco es que sea algo como muy optimista por necesidad, porque las órdenes que pueden haber llegado desde Singapur pueden ser cualquier cosa, pero cualquiera, y ya deberíamos tener claro a estas alturas que ahí no se puede hacer nada.

El entrenador, salvo sorpresa mayúscula, será el mismo, que para eso lo firmamos hasta 2027 y está haciendo una gran labor, y dejando ese tema, que no es algo menor, estamos esperando a saber quiénes serán vendidos, si hay más de uno, quiénes de los cedidos volverán, que se quiere también a más de uno, quiénes saldrán porque no se cuenta con ellos, que son varios, y con todo eso, cuántos jugadores nos hará falta firmar para poder tener una plantilla competitiva y que sea mejor que la que hay en este momento.

Y todo ello con un margen de tiempo escaso, con los demás haciendo faena, y nosotros esperando a que los Lim nos den los famosos OK a muchas operaciones que tenemos en marcha, pero que sin su consentimiento, y aunque se podrían firmar legalmente, no se pueden zanjar.

La palabra no sé si es preocupado, porque al final a todo se acostumbra uno, pero desde luego sí que andamos, al menos quien suscribe, expectantes por un lado, y como valencianistas, esperanzados con que lo que viene sea un poco mejor. Que tampoco hace falta esmerarse mucho para que así sea.