Especulación y miedo en el Valencia CF
Terminamos de comenzar el mes de octubre y ya se habla de una hoja de ruta clara en el Valencia, los rumores no benefician al equipo

El entorno del Valencia destaca por hacer grande todo tipo de rumores y por contar con algunos satélites que hacen del humo su modus operandi habitual. No hablamos de los rumores de fichajes o de parte de la prensa, concretamente lo hacemos de personas habituadas a hablar de ofertas que no existen, presentar propuestas utópicas e incluso formar asociaciones que claman por formar un nuevo club. Estos grupos suelen hacer ruido justo en los peores momentos, tras las derrotas suelen tener sus minutos de gloria en los medios presentando alternativas que terminan evaporándose entre la indiferencia.
En el valencianismo también existen las sentencias. Se llegan a hacer bromas especulando sobre "en qué jornada descenderá el Valencia" (esta misma semana lo hemos escuchado en algún medio nacional); dar por hecho que el Valencia terminará en segunda división en un período corto de tiempo es un clásico a poco que el equipo no encadene triunfos. Y luego están las especulaciones sobre las ventas que para muchos ya tiene cerradas el Valencia.
No hay que mezclar la información (que existe y en muchas ocasiones es alimentada por los propios agentes) con la crítica negativa y despiadada. Han bastado unos pocos partidos brillantes de Javi Guerra para que ya se dé por hecho que el club le ha puesto en el mercado (por supuesto hablando de cifras que no convencen a los críticos. En el hipotético caso de que el jugador fuera traspasado los más críticos siempre estarán ahí para decir que ha sido una mala operación). En verano ya ocurrió algo similar con Mamardashvili, se daba por hecho que era carne de venta pero finalmente se quedó en Mestalla. Queda mucha temporada por delante y alimentar la toxicidad absoluta a principios de octubre resulta demasiado precipitado.