Todo lo que rodea al Valencia es malo
No hay, hasta el momento, una sola noticia que nos invite al optimismo, que nos saque una sonrisa, y eso es algo muy duro de llevar

Todas las noticias que rodean al Valencia son malas o peores. Al menos hasta la fecha, porque desde que acabó la Liga, el 4 de junio, apenas si hemos sabido cosas que nos hayan dado una alegría. Corona ha sido ascendido, para cabreo general, y Baraja renovado, sin tener, ni mucho menos, un consenso mayoritario entre la afición valencianista. Se ha cerrado el fichaje de Cenk, y generó más incredulidad que otra cosa cuando fue fue anunciado.
Se ha debatido si Baraja lo quería o no, y a estas alturas ya da igual lo que fuera, porque el relato está escrito. Quería a Lato y se ha ido al Mallorca, que también se sabía pero quedaba la esperzanza del sentido común, y también a Kluivert, pero no podemos llegar a lo que los ingleses han pagado por él... y la van a abonar de sueldo. Layhoon nadie sabe dónde está, Peter Lim en Singapur, su hija Kiat se supone que también... y la campaña de abonos en marchas.
A 27 de junio, apenas 23 días más tarde de habernos salvado de bajar, no hay nada que invite a ser optimistas de cara al año que viene salvo por el valencianismo que corre por las venas de todos. No sé muy bien si va a cambiar algo, pero es más que obvio que debe hacerlo, pero ya no sólo por nuestra salud mental, que también, sino porque el Valencia no se puede permitir el lujo de volver a jugar con fuego otro año... las opciones de quemarse se multiplican.