Que el Valencia no arriesgue nada hasta la final de Copa, ¿qué significa?
Confieso que esta situación no me gusta nada, y reconozco que es incómoda para todos, pero es que la grandeza no se negocia...

La grandeza del Valencia no se negocia. Esto es algo que siempre tengo presente, y por eso ahora me choca que haya parte del entorno, y no es pequeña, que entienda que juguemos cada partido de Liga sin apenas titulares pensando en la final de la Copa del Rey ante el Betis. Que no seré yo quien diga que hay que mirar ese partido, y no reojo, sino con los dos bien abiertos, pero llegar a Europa a través del torneo de la regularidad es algo que se puede dar, y todos sabemos que esta plantilla da un alto nivel competitivo con todos los buenos bien de forma física… y de acierto.
Lo hemos visto en varias ocasiones durante el curso, y esto es algo que no se le puede escapar a nadie de ninguna de las formas. Tampoco tenemos tanto talento como para pensar que podemos ganar los partidos sin bajar del autobús o con el nombre, con lo que el hecho de levantar el pie del acelerador puede traer consecuencias también negativas. Y es que las dinámicas son algo esencial en el fútbol, y en la vida, y si llegamos La Cartuja ganando muchos partidos seguidos, tendremos más posibilidades, no le demos más vueltos. Y para eso, con todo el respeto a lo que pueda pensar José Bordalás, que sabe mucho mejor que yo cómo está su plantilla, creo que no debemos guardarnos nada en el cajón para ese día.
Que haya lesionados o sancionados es otro tema, o incluso algún tocado, pero es que a mí, por concepto, eso de guardar para otra batalla, me cuesta… Nos quedan dos partidos, Osasuna y Villarreal, y aunque el de La Cerámica es una traca, porque no se tendría que jugar ese día, igual que el Betis tampoco debería hacerlo, tengo claro que tengo opciones de ser titular hasta yo, pero el contexto es muy distinto, aunque nos podemos estar jugando mucho más de lo que pensamos contra los amarillos. Sólo espero que a Bordalás le salga bien el plan, porque es el suyo y es el nuestro, y porque me encantaría que a esta hombre les salieran bien las cosas, que se lo merece por muchas razones.