En noviembre-diciembre veremos grúas en el Nuevo Mestalla

Me da vergüenza todo el daño que se ha querido hacer al Valencia a cuenta del Nuevo Mestalla. Y lo peor es que ha sido desde aquí, desde dentro, no hemos tenido que vivir ninguna campaña de fuera, porque nosotros solos nos hemos bastado y sobrado para hacerlo. Chanzas, bromas, escarnio público, burradas sin límite en ese estado permanente de barra libre... mientras los hechos iban callando bocas, poco a poco, pero de forma inexorable.

Desde el año 2022 venimos diciendo que se tiene gran parte del dinero para acabar el campo, como así era, y que se estaba estudiando el resto con diversas opciones. Apareció la opción de Goldman Sachs y todo terminó, aunque ahora la seguidilla es que nos va a llevar a la ruina, porque claro, no acabarlo y perder 200 millones de euros era nadar en la abundancia. Se dijo de forma educada que las obras tendrían fases, que se están cumpliendo todas, y las que son más llamativas están a las puertas.

Supongo que habría quien esperaba mil grúas el primer día y 500 obreros trabajando noche y día. Vaya por delante que no entiendo nada de construcción de estadios, pero tengo la fortuna de contar con amigos que sí, y me dijeron de forma clara el proceso, que es el que se está dando, y el que el Valencia ha explicado a quien ha querido escuchar. Por muchas cosas estoy deseando ver esas grúas en la Avenidas de Cortes Valencianas, aunque tengo claro que, en ese momento, sacarán otra película de terror, no tendrán reparo alguno en ello.