Vinicius es un provocador malcriado, no una víctima de racismo

"A Vinicius no se le insulta por ser negro, simplemente enfada a la grada porque es un provocador". Las palabras no son más, sino de Carlos Kameni, portero camerunés con 15 años de experiencia en la Liga, en una Liga sin protocolos, de otro tiempo, sin protección, sin nada.  "Yo soy negro y en 15 años en Primera jamás me han insultado", decía a Relevo, y creo que no se puede definir mejor una situación artificial, forzada, y que se ha ido de madre.

Hay muchos jugadores negro en Primera, y en el Madrid, y resulta curioso que sólo se pita a uno, a uno siempre, en todos los campos, aquí y en Europa. O igual no es tan casualidad, porque quizá es que sólo hay uno que se dedique a provocar, a insultar, a menospreciar, a faltar al respeto... Y ese personaje es Vinicius, al que se quiere hacer pasar por la Madre Teresa de Calcuta, pero que no deja de ser un niñato malcriado en el que da igual el color de su piel.

El numerito montado en la previa del partido contra España es vergonzoso, sonrojante, lamentable. Y encima con la colaboración de medios de aquí, a los que les ha dado igual formar parte de una mentira que no se cree nadie con dos dedos de frente. Por esto habrá quien me llame racista, que si no me conoce me da igual, porque lo que yo tengo claro es que ese chico es un personaje al que se ha ido engordando, y que ahora mismo está fuera de control.