Las miradas seguirán encima de Cenk Ozkacar

Tiene que ser difícil jugar en el Valencia para Cenk Özkacar. Hemos visto ya demasiados casos como el suyo en los últimos años, y de todos ellos pienso lo mismo: podemos ser críticos, porque al final esto es fútbol, pero nunca debemos caer en ser injustos, y mucho menos en el desprecio con aquellos que, simplemente, no tienen la culpa de que el club tenga un máximo accionista que toma decisiones que no entiende absolutamente nadie.

La lesión de Diakhaby abría la duda razonable de si jugaría Cenk o lo haría Yarek, al que por cierto también se le dio fuerte pos sus errores contra el Celta, algo que tampoco me pareció sensato, pensando en la edad del chaval. En los dos partidos jugados, Cenk no ha estado mal, aunque tampoco ha brillado como si fuera una estrella rutilante. Ha cumplido, que al final suele ser siempre de las mejores cosas que le puede pasar a un central.

Con todo y con eso, alguna acción puntual fue criticado de una forma salvaje, como si fuera la que costaba una campeonato. A este chico hay que darle calma, paz, poco o ningún ruido para que tenga confianza en sí mismo, que es lo que hace mejores a los futbolistas. Ver y entender algo como eso me parece que es muy sencillo, y lo que no me entra en la cabeza es que haya tantas ganas de que cometa errores para poder decir aquello de "yo tenía razón".