Compromiso y fútbol para salvar al Valencia

Van a ser semanas de muchos agobios y nervios, nadie esperaba llegar a este punto de la temporada con tantos problemas pero el fútbol ha puesto al Valencia en el lugar que le corresponde. Voro tiene muy clara cual es su misión, pero en esta ocasión es consciente de que cuenta con piezas frágiles que no están demostrando aguantar la presión. Es momento de mantener la calma y tener responsabilidad, en el entorno hay demasiados frentes y guerras abiertas, algo que no ayuda.

El equipo tiene que abstraerse y mostrar su compromiso, la plantilla está cogida con pinzas pero es mejor que la de otros equipos. No hay excusas que puedan servir y todo lo que no sea que el Valencia se mantenga sin sufrir hasta las últimas jornadas debería ser considerado como un fracaso estrepitoso. Ya habrá tiempo de pasar facturas, de encontrar soluciones y sobre todo buscar la manera en la que la actual propiedad ponga fin a su estancia en el club.

Mientras tanto no queda otra que apoyar para evitar el desastre, Voro llega para ayudar pero existen muchas dudas sobre si es la persona ideal para llevar el barco restando tantos partidos. Los jugadores deben imponerse por fútbol y no se puede tropezar ante rivales directos, es momento para los veteranos y por ello comportamientos como el de Paulista el pasado jueves tienen que desaparecer. En Girona se disputa la primera de las 19 finales que le quedan al Valencia; el compromiso es innegociable pero no suficiente para llegar al mínimo exigible.