El Valencia, con los buenos, es un equipo TOP, pero no puedes perdonar

El Valencia es un equipo TOP con sus mejores jugadores sobre el campo y rindiendo al nivel que se espera y se desea de ellos, y jugando al fútbol que les hace un conjunto temible. De un hipotético once titular tipo “sólo” faltaban Dani Parejo y Kondogbia, y en muchas fases del encuentro, al menos contra los celestes, se notó más bien poco, que es para lo que se ha hecho una gran inversión en fichajes por un lado, y se ha hecho el esfuerzo de no vender a nadie por otro. Y cuando se combinan todos esos factores y el Valencia es un equipo directo, cuando presiona, roba y corre, es muy complicado pararlo, porque la calidad es mayor que la del año pasado, los recursos también, y el hambre debería serlo en la misma medida. Una buena primera parte, por fin.

La segunda empezaba por los mismos derroteros, incluso con el equipo pudiendo hacer el segundo. El equipo se gustaba, llegaba, tenía ocasiones, sobre todo a la contra, pero no terminaba de sentenciar un partido que era totalmente suyo. Ver a Guedes, Rodrigo y Batshuayi juntos y divertirse es una auténtica gozada. Pero el segundo no llegaba y el Celta se empezaba a estirar, y con peligro. Coquelin, extraordinario, se ahogaba, lógico, y Kondogbia volvía para poner orden al medio campo, algo que empezaba a hacer falta faltando 25 minutos para el final. Y a falta de 9 el problema: gol del Celta. Se volvió a intentar todo, se tuvieron ocasiones, pero sin gol no hay manera. La mejoría es grande pero la victoria no llega.