Que perder en el Valencia signifique dolor, nunca costumbre, o estamos acabados

Si llega el punto en que perder se hace normal, si ya no duele, si da lo mismo, justo ese día podemos enterrar el sentimiento, porque se habrá agotado para siempre

Toni Hernández | 23 MAR. 2017 | 00:02

Que el Valencia pierda debe seguir doliendo, escociendo, generando que haya quien se quede sin comer, sin cenar o sin dormir, porque el día en que eso no pase, el momento en el que perder sea normal, una norma habitual, justo ese día todo habrá terminado, el sentimiento será un recuerdo del pasado y tendremos que pensar, todos, en muchas cosas. Hace unos años, Pedro Cortés se sacó de la chistera aquello de la política de gestos y la política de hechos, o lo que es lo mismo, lo que debes hacer para que todo vaya bien, y lo que debes aparentar hacer bien para la misma función. Discutí mucho con Pedro, aunque le guardo un gran cariño, y en esto tiene razón, y es que si el club no sangra, si no muestra que sufre, si no evidencia que le duele perder, da igual el rival y las circunstancias, ¿qué le podemos pedir al aficionado?

Todo el post partido de Barcelona es para olvidar, y tal vez el partido también, pero lo que no se puede dejar al lado son los mensajes que se deben ,mandar al aficionado, al valencianista que lleva ya dos años sufriendo con y por su equipo de una manera que no tiene sentido, porque no lo merece y porque el plan no era ni mucho menos. No sé quién tiene que salir a hablar, ni qué tiene que decir (bueno, si lo sé, pero sólo sería mi opinión, no la verdad absoluta), pero esos detalles se deben cuidar de una manera exquisita, porque corremos el riesgo de que perder sea lo normal, que no pase nada si se hace, y terminar siendo un club del montón.