Voro decidió poner punto y final a su nueva etapa como entrenador del Valencia realizando algo que no ocurría en el equipo desde mayo de 2015, repetir alineación. Ante el Atlético de Madrid jugaron de inicio los mismos jugadores que lo habían hecho una semana antes y con ello se ponía fin a una espectacular racha de 504 días sin que el Valencia repitiera un mismo once en el campeonato nacional de liga.