Que el Valencia se quede en Mestalla es imposible, fin del debate

Cuando el Valencia se vaya de Mestalla nadie llorará más que yo. En todo caso habrá muchos empates, proque todos sentimos lo mismo por la que ha sido la única cada que hemos conocido en nuestra vida para nuestro equipo. Y eso no se cura, ni se cambia. Pero lo que no tenemos que hacer es confundir los sentimientos, aunque los llevemos en lo más profundo, con lo que dicta el futuro y el sentido común más allá de todo esto.

Alguien me explicará de dónde ha salido este debate sobre si nos podíamos quedar en el actual campo, cuando todos sabemos que eso es imposible. Algunas voces llegaron incluso a señalar a la alcaldesa, que sólo respondió a una pregunta que le habían hecho, sin entrar en más. Aunque la palma se la llevan aquellos que han estado machacando años con las exigencias de un campo que no se puede pagar y que ahora quieren darle mano de chapa y pintura a Mestalla para no irse.

Es un entorno en el que nunca sabes qué puede pasar mañana, y donde se puede decir una cosa y la contraria, en el breve espacio de tiempo, y exactamente con la misma vehemencia. Este tema tiene que estar finiquitado de forma inmediata, porque no hay salida, no hay otra opción, y de eso no nos hemos enterado hace un rato, sino que lo sabemos hace nada menos que 20 años, cuando Peter Lim no sabía ni dónde ubicar Valencia en el mapa.