Y en el Valencia, todo sigue igual

La manifestación del 2M no ha cambiado nada en el Valencia, y por eso no se debe enfadar nadie. Al menos nadie que sea razonable. En los días previos, algunos como quien suscribe, primero animaban a todo el mundo a ir, y segundo, pedían por favor responsabilidad a la hora de establecer expectativas. Lo primero estaba claro, y lo segundo, por desgracia, también. De hecho se intentó hacer pasar como consecuencia de la manifestación una moción del ayuntamiento.

Lo que me enfada de todo esto no es que la gente salga a la calle a decir lo que siente, o que lo haga en Mestalla. Sólo faltaba que tampoco se pudiera hacer eso para que el desastre fuera definitiva. Lo que me enajena es que digamos que así se cambian las cosas, cuando eso no es cierto, no es verdad, y hay valencianistas, que necesitan creer, y lo hacen. Y luego vienen los bofetones de realidad y nadie tiene la culpa de nada.

Todos queremos un Valencia mejor, y es posible que eso pase por un Valencia sin Peter Lim, de hecho es el único camino. Pero no podemos equivocarnos en ver lo que tenemos delante, porque si lo hacemos, nos toparemos con la piedra de Meriton y con la de una realidad que nos negamos a ver, y eso es demasiado. Vamos a ser sensatos, nada más que eso, y hacer lo que tengamos que hacer para que el Valencia sea lo que queremos, ni más ni menos.