La gestión de la portería del Valencia CF

El Valencia es asiduo a crearse nuevos problemas en cada verano, posiciones que se quedan huérfanas y son expuestas a los experimentos. Podemos decir que a día de hoy hay problemas en todas las líneas del equipo ya que el éxodo de los cedidos ha dejado en cuadro tanto la medular como las zonas de ataque. En defensa hay que acometer alguna incorporación pero las urgencias no son tan grandes como en el centro del campo.

El gran dilema está en la portería, una posición que el Valencia tenía bien cubierta por la progresión de Mamardashvili,pero el georgiano es candidato a salir y esto sería una malísima noticia. En primer lugar porque se perdería seguir contando con uno de los porteros más prometedores de La Liga, el dinero de su traspaso serviría para tapar agujeros pero en lo deportivo el golpe sería duro. Jaume seguirá, se lo ha ganado aunque su papel en el campo es muy reducido, es un hombre de vestuario pero sin nivel para luchar por la titularidad. Herrerín se ha marchado sin que se sepa muy bien a qué vino, y Cristian Rivero sigue en el ostracismo más absoluto.

Con esta escenario sería obligado acudir al mercado, y ni hay demasiadas opciones ni el Valencia tiene peso económico para apostar por un guardameta fiable. Habría que agotar todas las vías antes de vender a Mamardashvili a no ser que la oferta fuera mareante, mantener un portería segura y estable es esencial para cualquier equipo.