Nuevo Mestalla: más trabajar y menos hablar

“Me van a ver hablar poco y trabajar mucho con el tema del Valencia y espero ser eficaz con esa dinámica”. Las palabras son de María José Catalá, futura alcaldesa de la ciudad, y aunque seguro que muchos le van a ver un trasfondo político que no existe, a mí me parecen sensatas.

Aunque desde luego me va a gustar más que sean ciertas, sin duda. Catalá decía, con bastante acierto, que “en los últimos meses se ha hecho mucho pronunciamiento público que no atendía a negociaciones que hayan mejorado la situación del club, de la afición y del estadio, que es lo que más incide en la competencia municipal”.

Que el Valencia y el Nuevo Mestalla han sido asuntos politizados intentando sacar rédito por la crisis social es evidente. Que parece ser que muchos votos no han dado a los que han intentado sacar tajada del asunto, lo mismo. Esto va de sentido común, de ser pragmáticos y de poner soluciones de verdad, no sacar una falsa dignidad que se ha demostrado como una pose de cara a los comicios.

Hay que acabar el campo, hay que derribar el actual Mestalla y Valencia debe dejar de ser esa ciudad donde hay un mausoleo a la burbuja inmobiliaria. Creo que estamos muy cerca, como igualmente creo que lo estaríamos con otros ganadores de las elecciones del pasado 28 de mayo, pero es obvio quién parece que va a poner punto final a este problema.