La realidad de lo bueno y de lo malo que le pasa al Valencia

El dueño es sólo el culpable, nunca el responsable, aunque la dura realidad es que todo, siempre, pasa por él, aunque seamos selectivos

Toni Hernández | 27 MAY. 2020 | 07:30
Peter Lim

Todo lo que bueno que pasa en el Valencia de Peter Lim es a pesar de Peter Lim, y todo lo malo, por culpa expresa de Peter Lim. Esto no es un modo de ver las cosas, es la realidad que podemos tocar todos los días, que es obvia en gran parte del entorno del club. Hace años que defiendo que la figura o nexo de unión entre la propiedad y la afición debería existir. El perfil perfecto era mi querido Jaume Ortí, pero no se llevó a cabo. Ahora Ricardo Arias está ejerciendo de cara del club, y es bueno, muy bueno, pero sin duda haría falta alguien más para poder acortar las distancias que existen, que son muchas.

Abogué por Fernando Gómez Colomer, alguien que sin duda reúne los requisitos que pueden hacer falta. Aunque nuestra relación es correcta, no somos amigos. Es decir, que si entra o no entra, yo seré igual de feliz a nivel personal, pero entiendo que el Valencia, si no ocurre, perderá un activo valioso. Y es que alguien debe ser la imagen del club a nivel directivo. Porque no es razonable que todo siempre esté mal. Ni razonable ni posible, porque hasta un reloj estropeado da la hora correcta dos veces al día…

Lim es el dueño porque fuimos unos mezquinos egosítas que vendimos nuestras acciones por 4 pesetas. Una verdad que no queremos escuchar. "Por ser el dueño no puede hacer lo que le dé la gana", se dice. Y claro, te tienes que contener, porque obviamente, puede hacerlo. No comulgo con todo lo que hace, porque entiendo que muchas cosas tendrían que ser distintas, y que deben hacer es esfuerzo de empatía con el entorno. Aunque también creo que el entorno debería hacer lo mismo... o comprarle el club, claro.