El drama de Denis Cheryshev

El drama de Denis Cheryshev, lo que le impide ser un jugador de fútbol especular, además de esa extraña toma de decisiones en los partidos que le hacen ser un jugador extremo (como hace poco le calificaban en las redes sociales, de forma bastante acertada), son las lesiones. Siempre pequeñas, salvo hace unos años en el Villarreal, siempre musculares, como si no fuera capaz de aguantar varios partidos seguidos de cierto nivel, con cierta exigencia. Cuando el Valencia pidió su cesión, por segunda vez, tanto el club como el técnico, con el que ya había trabajado, tenían claro este asunto, pero había una confianza importante en que fuera el hombre que le diera descansos de calidad a Gonçalo Guedes. Y además estaba empezando el año bastante bien, tanto en su equipo como en su selección.

Cheryshev es un jugador muy raro. Piensa diferente a la mayoría, la pega cuando todos controlarían... es impredecible. https://t.co/0hqgnEjCVz

— Mario (@10Mario23) 14 de octubre de 2018

Venía de hacer buenos encuentros con Rusia, de incluso anotar goles, y con la garantía de ser titular en al menos un par de partidos porque Guedes no estaba recuperado de su lesión el día del Barcelona. Pero contra el Leganés apenas duró 15 minutos sobre el terreno de juego, cuando un pequeño problema, de nuevo, volvía a mandarlo a talleres antes de hora. Ahora el equipo tiene un problema de cara a la final de suiza contra el Young Boys, y el propio Cherysshev a sus fantasmas rondando de nuevo. Algo que tiene que terminar, al menos mientras sea jugador del Valencia.