Para hablar del Valencia, en cierto tono, hay que ser del Valencia

Para ser periodista y hablar del Valencia, ¿debes ser del Valencia? Este es un debate que yo creía enterrado hace ya mucho tiempo, porque tampoco lo terminé de entender nunca. Puedes ser del equipo que quieras y comportarte como un profesional de los pies a la cabeza, dando una información clara y contrastada, haciendo entrevistas con rigor y siendo una referencia.

Eso nunca lo he visto un problema, jamás. Lo que siempre he detectado como un obstáculo, por decirlo finamente, es cuando se pretende ir al corazón, al sentimiento, tirar de la veta de la emoción, y no eres del Valencia. Ahí, a todos, se les ve el cartón a distancia, y con las luces apagadas, porque es cuando de verdad se ve quién es y quién no, porque ya no estamos hablando de información, sino de algo mucho más profundo.

Conozco a muchos periodistas de esta ciudad, a muchos, porque bien nos hemos criado juntos, somos amigos o hemos tenido la misma profesión. Todos sabemos de qué equipo somos cada uno, y eso es algo que debe quedar siempre en el ámbito personal, y cada uno luego lo diga o no lo diga.

Pero ahora, cuando leo o escucho a algunos, y tiran de ese sentimiento de pertenencia que sólo tenemos los que somos, como ellos de su equipo, primero me da rabia, porque el mensaje no debería ser ese, y segundo me entran unas ganas de coger el micro que no he tenido en los 12 años que llevo alejado de la radio. Porque seguro que estaría equivocado en mil cosas, o en más, pero ahora mismo ser y sentir es algo indispensable en el entorno del Valencia.