El valor del Valencia, para un inversor, no es el fútbol

“El Valencia vale lo mismo en Segunda que en Primera, porque le metro cuadrado en la Avenida Aragón no varía su precio por eso”. La frase es mía, y se la he dicho en alguna ocasión a un buen amigo, porque seguimos empeñados, al menos en ciertos sectores, en decir que si bajamos todo será más fácil para que Meriton se vaya. Ni será más fácil ni más difícil, será igual que ahora mismo, porque estamos hablando de dinero en un contexto en el que el interés que pueda tener un inversor, lo mismo que el propio Lim en su momento, es de cualquier cosa menos deportivo.

Sí, nosotros nos tiramos las manos a la cabeza porque no lo podemos ver de este modo bajo ningún concepto, pero tampoco somos quienes debemos poner 300 millones de euros, o más, en hacernos con una empresa a la que luego hay que darle viabilidad y hacerla rentable. Jugamos partidos distintos, esa es la pura verdad, y jamás se van a cruzar, porque los valencianistas nunca veremos al Valencia como una empresa, y el inversor que haya de forma coyuntural al frente no tendrá nuestro sentimiento…

A no ser que sea valenciano, algo que mi cabeza ha descartado ya por completo hace mucho tiempo. Quien venga no lo hará por el fútbol, que ojalá y me equivocara por completo y nos tocara en suerte un tipo obsesionado, de verdad, con ganar la Champions, pero hacerme trampas al solitario, que alguna vez lo he hecho, no va ya conmigo. Mestalla y el Nuevo Mestalla es la clave de todo, por donde pasan nuestras opciones de cambiar de máximo accionista. Y lo demás es algo que generamos nosotros, y que no nos sepa mal.