Toni Lato y el Valencia

Ya nadie habla en el Valencia de la renovación de Toni Lato. Y el primero que va a callar será el propio jugador, que es demasiado valencianista como para ahora poner por delante tal y como están las cosas. En e club hay una parálisis evidente generada por el pánico, a la par que la incerteza y el no tener demasiado claro quién debe tomar según qué decisiones. El de la Pobla termina su contrato el 30 de junio, como ya sabemos todos, y tuvo encima de la mesa una oferta para seguir, que todo el mundo, hasta quien la presentó, sabía que no se podía aceptar.

No salió en el mercado de invierno a pesar de las muchas ofertas que tenía encima de la mesa, primero porque Gattuso no quería, y segundo, cuanto el italiano ya no estuvo, porque no se podía decir que sí o que no ante una situación como esta. Toni actuó como valencianista y calló, porque ahora hay en juego cosas más importantes que su futuro, que de una forma u otra se despejará, y el Valencia siempre ha de ir por delante.

No sé lo que hubieran hecho otros en su misma situación, tampoco quiero pensarlo porque no me llevaría a ninguna parte, pero precisamente esa actitud es la que me convence de que este tipo de gente debe estar siempre en mi equipo, siempre. No escucharemos nada sobre su futuro de aquí al final, al menos de su entorno y de su boca, y sólo pondrá la mejor cara posible para sacar todo adelante. De las muchas cosas que espero de aquí al 30 de junio, que ya cuento con que muchas no se darán de ninguna manera, una de ellas es ver que Toni sigue en su casa. Más que lo merecido lo tendría.