Mario Kempes y sus 'verdades incómodas'

Opinión/ Cuando El Matador opina sobre el Valencia siempre es noticia, Mario Kempes volvió a mostrarse crítico con algunos aspectos de la gestión del club

Jose Hernández | 02 MAY. 2020 | 08:01
Mario Kempes

A estas alturas no sorprenden las últimas declaraciones de Mario Alberto Kempes sobre algunos aspectos de la gestión del Valencia CF. Tan cierto es que el divorcio entre la propiedad y el futbolista más mediático de la historia de la entidad es un hecho, como que el argentino cuenta con el cariño de casi la totalidad de la afición. Sus críticos le acusan de incendiario, pero discutir el aprecio que El Matador tiene por el Valencia solo queda a la altura de gente que desconoce por completo su trayectoria. Y precisamente no se puede calificar a los actuales gestores del club como eruditos en la historia del Valencia CF y sus leyendas, el trato de Meriton a Kempes no ha sido el más correcto aunque es cierto que el ex campeón del mundo nunca se mordió la lengua; en el Valencia de Peter Lim eso es pecado mayor.

"Llegó un momento en el que la sociedad del Valencia no se enteraba de lo que pasaba en el club. Dije unas palabras que no le gustaban a la propiedad. Parece que si no dices lo que quieren, eres un sapo de otro pozo. Yo no vivo del Valencia y no tengo que casarme con ellos para ser embajador del Valencia CF", afirmó Mario Alberto esta semana. Sus palabras habrán escocido a muchos pero no le falta razón. El propio Anil Murthy reconoció hace unos meses que el club buscaba funcionarios que acataran órdenes con rigurosa disciplina asiática. Marcelino García Toral y Mateu Alemany sintieron en sus propias carnes la dureza de la propiedad, ni siquiera crear un proyecto ganador fue suficiente para seguir trabajando con algo de independencia.

Como decimos siempre, es totalmente legítimo que los dueños del club trabajen con sus propios mecanismos y tomen decisiones drásticas por muy impopulares que parezcan. Pero obviamente, será difícil que de esa forma logren ganarse el respeto y el cariño de la afición. También se ha demostrado que sin cabezas visibles que conozcan el terreno de primera mano y a la vez cuenten con el carisma suficiente es complicado que el proyecto traiga buenos resultados. Nuevamente Kempes fue muy directo en este aspecto: "Yo me metí con los dueños del Valencia, no puedes dirigir a un club a miles de kilómetros". Se trata de duras declaraciones pero también de verdades muy incómodas, un club de fútbol nunca puede funcionar de la misma forma que otro tipo de empresas, es una regla incuestionable que termina castigando a aquellos que no tienen la flexibilidad suficiente. De la misma forma, las opiniones de las leyendas históricas deben ser escuchadas siempre.