El Elche tira de ingeniería legal para hacerse con Rober Ibáñez

Hecha la ley, hecha la trampa. Metidos de lleno en el mercado de fichajes de invierno, el Elche CF es uno de los equipos más interesados en moverse para reforzar su plantilla en la lucha por salir de los puestos de descenso. Un interés que choca frontalmente con la decisión tomada por la RFEF, que vistos los graves problemas económicos que atraviesan los ilicitanos, les ha prohibido acometer cualquier tipo de incorporación. Algo que daría al traste con los planes que tienen los de Fran Escribá en relación al futbolista Rober Ibáñez, para traerlo vía cesión procedente del Valencia CF.

Pese a las trabas legales el Elche CF sigue teniendo a Rober Ibáñez como prioridad y el técnico ilicitando lleva varias semanas comunicándoselo, tranquilizando al entorno del jugador respecto al interés del club alicantino para conseguir sus servicios.

Aprovecharían las circunstancias del jugador para inscribirlo como futbolista con ficha del equipo filial, algo que también tiene ahora en el Valencia CF y que está relacionado con el dorsal '27' que luce a la espalda el canterano 'ché'. Del '26' hacia adelante indica que el jugador posee una ficha como futbolista del segundo equipo, y eso es precisamente lo que va a trabajar el Elche para que se haga efectiva la cesión de Rober hasta final de temporada.

En este tono están transcurriendo las últimas conversaciones entre Fran Escribá y el entorno del jugador, mucho más tranquilo tras saber que la prohibición de la RFEF no va a dar al traste con su ambición de tener minutos en otro equipo de Primera División. Superada su neumonía y de vuelta a pleno rendimiento a los entrenamientos con Nuno Espírito Santo, sólo queda pendiente acordar la renovación hasta 2020 que Valencia y jugador tienen muy adelantada para que se pueda llevar a cabo la cesión.

Otros equipos de Primera como el Granada o el Córdoba de Djukic, que también andaban detrás de sus servicios, son conscientes de que el futbolista prefiere Elche y seguir los pasos de su compañero Carles Gil, quien ya tuvo dos años de éxito en la ciudad alicantina.