Un Valencia fuerte jugando lejos de Mestalla

El Valencia no es igual de fuerte en casa que fuera. Esa es una realidad que nos ha dejado la primera vuelta aunque, curiosamente, el equipo ganó su primer y su último partido como visitante en esta primera mitad del curso. 2 victorias, Sevilla y Rayo, 3 empates y 5 derrotas, ese es el bagaje del equipo lejos de Mestalla. 9 puntos de 30, bastante menos del 50%, y que al final hace que, con el enorme rendimiento como locales, andemos ahora mismo en la mitad de la tabla.

Eso se puede cambiar, y se debe cambiar, y Baraja está en el proceso de cambiarlo, porque además, ahora mismo tiene más argumentos para poderlo llevar a cabo, y todo ello sin que lleguen los fichajes que el equipo objetivamente necesita, pero con los que ahora mismo no se hacen cuentas, porque no sirve de nada. 

El estado de ánimo y la confianza que se tiene ahora mismo es otro de los factores importantes, así como el hecho de tener muy claro algo que se puso de manifiesto en Cartagena el pasado domingo: hay que ir al 100% siempre, porque en caso contrario nos convertimos en un equipo muy normal, y eso suele terminar mal.

En Cádiz hay una oportunidad de oro para muchas cosas, y no la tenemos que desaprovechar, porque además soy de los que piense que este equipo, cuando no tenga agobios, va a dar un paso adelante más marcado todavía, y eso va a ser bueno para lo que pueda quedar de Liga en ese momento. Debemos ser los mismos. Podemos ser los mismos. Y si conseguimos ser los mismos, vamos a poder sonreír un poco, que falta nos hace a todos después de estos años.