En el entorno del Valencia ya no nos gusta hablar de fútbol

En el entorno del Valencia ya no nos gusta hablar de fútbol, cada vez lo hacemos, y lo peor de todo, poco a poco se van quitando las ganas a los pocos o muchos que aún nos gusta. Porque es acabar discutiendo, amargado, y hablando de Peter Lim, cosa que me revienta, porque él, como otros, está de paso, y mi equipo y mi club siempre están aquí. Pero estamos en un círculo vicioso del que tampoco parece que tengamos muchas ganas de salir, lo que además es un problema añadido a los muchos que ya tenemos.

Aquí sólo se trata de hablar de mamadores o meritoners, de quien tiene planes geniales para salvar al club sin poner ni uno, de su soy de Bordalás o no, si la mitad de la plantilla debería devolver la camiseta porque no se la merece, que si Lim noi va a fichar a nadie, ni regalado, y va a volver a vender a todo aquel por el que haga una oferta cualquier club por muy miserable que sea... Y claro, de la ATE de Mestalla y la partida de póker que llevan jugando algunos muchos meses pero que parece que ya se acaba.

La pandemia ha hecho mucho daño, ha provocado mucha desafección, en general, y en Valencia en particular. Estamos todos desencantados, cansados, hastiados, y muy preocupados. Pero como decía Rafa Lahuerta, "de Mestalla no me va a sacar esta gente", y de la pasión por este equipo no nos puede apartar nadie tampoco. El fútbol es la esencia, no lo olvidemos, y no perderla depende sólo de nosotros. Por mucho que nos gustara tener otra plantilla o vivir un poco mejor. Pero los que se ponen nuestra camiseta son los nuestros, juegan al fútbol, y de eso habría que hablar un poco más...