Un gran Valencia dice en Barcelona que puede ser un buen equipo

Un gran encuentro, con las ideas muy claras siempre, creyendo en lo que hacía, y reponiéndose a palos e injusticias arbitrales

Toni Hernández | 19 DIC. 2020 | 18:15
El Mestalla celebrando un gol

El Barcelona - Valencia más importante de los últimos años. Así podíamos llamar al partido del Nou Camp. Volvía Gayà después de un mes, y quizá era el once de gala de Javi Gracia con todo lo que tiene a su disposición. El plan de partido que daba claro desde el comienzo: esperar atrás, muy juntos, y buscar las espalda con la velocidad de Guedes y Maxi consiguiendo abrir espacios. El equipo estaba en el último cuarto de campo, y eso hacía que el juego estuviera siempre al borde del área propia. Llegando al primer cuarto de hora, incluso se estiraban los visitantes. La primera clave era defender bien, y la segunda hacer sufrir al Barcelona a su espalda. El inicio, al menos, cumplió el guión. Y se iba creciendo y creciendo, y viviendo en el área rival, hasta el punto de empezar a tener ocasiones claras, como una doble de Maxi y Yunus, que marran el remate, y luego Gayà y Cheryshev que se llegan a molestar.

En el 28, el equipo robaba arriba, cerca del área, y Soler enviaba un derechazo que obligaba a Ter Stegen a hacer una parada enorme. La jugada acababa en córner… y en ese saque de esquina, Diakhaby hacía el 0-1 en el minuto 29. En el global, hasta ese momento, resultado justo. Se debía seguir igual, y lo cierto es que nada cambió en el partido: el Barcelona atacaba, el Valencia esperaba, y buscaba correr. En el 40, primer problema. Musah se lesionaba y entraba por él Álex Blanco. En el 44, jugada fantástica del equipo, con un gran centro de Cheryshev, y un remate brutal de Maxi… que respondía el portero alemán con otra parada gigante. Y como el fútbol es cruel en extremo, la siguiente jugada era penalti para el Barcelona y expulsión de Gayà… muy injusta, porque no era falta de ninguna de las maneras. El VAR lo dejaba en amarilla, pero no quitaba el penalti. Jaume paraba el penalti, pero en el rechaza marcaba Messi. Todo muy cruel, pero 1-1

La segunda mitad empezaba marcada por lo ocurrido al final de la primera, aunque la idea de los hombres de Gracia era la misma. Y la más clara la tenía Cheryshev en el 48, después de una gran jugada de Guedes, pero el ruso remataba peor que mal, solo ante el portero. En el 51, en una jugada de rebotes y con mala suerte, Araujo hacía el 2-1. Todo había cambiado de forma absurda. En el 56, el Barcelona podía hacer el tercero, pero Jaume lo evitaba con una gran parada. Racic podía hacer el 2-2 tras una buena jugada de Álex Blanco, pero su remate sea iba por muy poco. El Valencia, enrabietado, se mostraba como un equipo que puede morder si se lo propone. A falta de 25 minutos, la pregunta era lo que podían aportar los cambios, porque ahí estaba la clave para poder sacar algo finalmente del Nou Camp.

Y en el 68, llegaba el empate a 2 con un golazo coral maravilloso. Guedes, pase exterior a Gayà, que se hace fuerte y la mete en el área para que el uruguayo haga de 9 nato. Se hacía justicia de nuevo. Jaume sacaba un pelotazo tremendo en el 71, y mantenía vivo al equipo. Faltando un cuarto de hora, todo era posible. Y Gracia estaba guardando aún los cambios. Coutinho no hacía el tercero en el 78 por medio palmo, pero su remate se marchaba fuera. Guedes tenía el 2-3 tras una contra de Blanco, pero el luso llegó forzado. En el 86, un gran Guedes se marchaba y entraba por él Manu Vallejo. En el 89, Cheryshev se iba dando paso a Kang in Lee. Pero no hubo tiempo para nada más. Buen punto, buen partido... buen Valencia.