¡Qué bonito es ganar! Y cuantas cosas en Valencia tienen menos importancia que perdiendo

Resulta curioso la cantidad de cosas que molestaban hasta herir estos dos últimos años y que ahora, simplemente, parece como si no pasaran

Toni Hernández | 23 FEB. 2018 | 00:01

El Valencia en puestos medios o bajos de la tabla, sin ganar partidos, siendo destrozando en casa casi cada semana, viendo el descenso cerca. Vamos, propongo imaginar al equipo de estos dos últimos años, que tampoco hay que irse muy atrás. Imaginemos ese contexto, esa situación, con los siguientes parámetros: un equipo sin director deportivo, con visitas a un médico de cabecera que está en Asturias y con el dueño sin venir más que a algún partido de forma esporádica. ¿Alguien se imagina la que habría montada en esta ciudad si todo eso fiera así? Pues salvo lo primero, que gracias a Dios el equipo de Marcelino García Toral está peleando por meterse en la próxima edición de la Liga de Campeones, todo es tal cuál. Y como este año se gana, las cosas que realmente no tienen importancia, porque no la tienen, pasan por alto.

Porque al final no hay una fórmula matemática para hacer las cosas, igual que no hay un plan bueno, sino unos que salen y otros que salen mal. El Valencia de Marcelino y Mateo Alemany funciona así, y además, funciona bien, y por lo tanto, ciertas cosas que forman parte del día a día interno del club están bien como están, sea como sea que estén. Y esto lo digo porque no siempre se gana, y las cosas no se hacen de manera distinta en un estado o en otro. Recordemos, no hay plan malo. Y la culpa de que el equipo perdiera estos dos años no era de Lim que venía poco, porque este año viene lo mismo, y sí se gana, pero parece que eso ya no es un problema. Me he tirado dos años diciendo que el único problema era que no se ganada, y muy loco parece que no estoy.