El mejor camino del Valencia la Champions League... jugar la final de Copa, y ganarla

El mejor camino del Valencia la Champions League... jugar la final de Copa, y ganarla. El fútbol es un estado de ánimo, y a nadie se le puede escapar que si se consigue el pase a la gran final del Wanda Metropolitano (parece que será allí), el partido contra el Levante de este fin de semana se habría empezado a ganar antes de jugarlo. Porque la moral de todo el mundo estaría por los aires, habría recibido, después de muchas semanas, un refuerzo positivo. ¿Plantilla corta? Claro que sí, esto no es nuevo, ya lo sabíamos en agosto, y se ha recordado más con las malditas bajas, pero sólo quedar jugar y ganar hoy contra el Barcelona. Después sólo será de fin de semana en fin de semana, a excepción, ojalá, de volver a una final nada menos que una década después.

Se ha hablado mucho estos días de elegir, de qué conviene más, de dónde se deben emplear los esfuerzos de la plantilla. La Copa del Rey hace falta porque la estima de un club y su afición se mide en gran medida en las veces que “tocas metal”. La Champions League hace falta porque la fiesta se tiene que pagar con dinero, y la competición del balón de las estrellas da, y mucho. Se deben internar las dos cosas, como se ha hecho, y aunque el peaje está siendo alto, quedan 90 minutos en Mestalla para que se vuelva a la “normalidad”. Los lesionados se irán recuperando del todo, habrá más descanso, una final aparecerá en el horizonte, y cada sábado o domingo, o viernes o lunes, que esto es España, este equipo “matará” por estar entre los 4 primeros. Ya pasó hace casi 20 años, y la historia dicen que es cíclica.