La Grada de Animación de Mestalla, el Valencia y la política

La Grada de Animación de Mestalla se echa tanto de menos en el Valencia como un medio centro defensivo de nivel. Eso es algo en lo que todos, supongo, estaremos de acuerdo, y que requiere, desde hace ya unos cuantos años, una solución. En su día me quemé con esto sentando a unos y a otros para no lograr nada, y lo que me llevé fueron improperios de bastantes colores, con lo que la verdad es que mi menta había aparcado este tema.

La presentación fue una especie de punto de inflexión, porque la imagen de la grada, vacía y desangelada, era algo que no podía ser. A muchos se nos movió el cuerpo, claro, pero unos tienen más ascendencia que otros, y que el capitán Gayà moviera ficha, ayudado por el club en la persona de Javier Solís, fueron dos pasos básicos para que el tema llegara a buen puerto. Que al final es lo que le hace falta al Valencia por encima de todo.

Que la grada la lleve Tomás Ribera es la decisión que se ha tomado. ¿Que qué me parece? Algo muy acertado, valencianísticamente hablado? Porque él mejor que nadie sabe cómo se tiene que hacer, y con quién. ¿Que eso ha dado paso a un debate político hablando de nazis y demás? Previsible, porque lleva años pasando. ¿Y qué me parece eso? Que dentro de Mestalla, cuando el Valencia marca, no le pregunto al de al lado a quién vota.