¿Quién normaliza que en el Valencia seamos la nada?

No conozco a nadie que sea del Valencia, de verdad, que haya normalizado el hecho de ser intrascendentes, de no aspirar a nada más que no bajar, a ser mediocres con respecto a nuestra historia y nuestro potencial. Y nadie es nadie, lo mismo que tampoco existe valencianista parido de madre que justifique todo lo que nos pasa.

Sí conozco sin embargo a muchos, o al menos algunos, que dicen que ven a estas personas, que existen, que andan por ahí, y que hacen ruido. Las deben tener escondidas en algún sitio o les hablan en sueños, porque la cruda realidad, como tantas veces pasa en este santo club, es bien distinta. “Es que Mestalla está dormido, es que no protesta”.

Tiene narices, por no decir otra cosa, que ahora andemos con esto. Durante años se han hecho manifestaciones, carteles amarillos, vaciados, presión a la prensa internacional, visitas constantes a los juzgados. ¿Resultado? La nada más absoluta, porque al final, la mayoría silenciosa, la inmensa mayoría, ha entendido que esto va de dinero, de un dinero que no tenemos, y que lo único que está en nuestra mano mientras llega otro dueño, que recemos para que sea mejor, es mantener el club vivo, y en Primera, nada más.

Y eso no es normalizar nada, sino tener las ideas claras y ser del Valencia por encima de todo. Podemos jugar a seguir en guerra, que está claro que nos gusta más que comer con los dedos, pero no vale para nada, no suma, no aporta, y de hecho, hace un  mal del que quiero pensar que no somos conscientes… lo que me parece una barbaridad, dicho sea de paso. Pero nada, sigamos jugando a ver lo que pasa.