Ahora se dan cuenta algunos de lo que hacía falta para vender el Valencia: asco y vergüenza

Esto demuestra que siempre es el quién y nunca es el qué, y que estos años que nos ha tocado vivir son para que algunos pidan perdón

Toni Hernández | 02 JUN. 2025 | 00:03
Mestalla

Parte del entorno del Valencia da mucho asco, pero mucho, y además, vergüenza ajena. Y por si esto no fuera poco, han perdido toda noción de la vergüenza, porque son capaces de decir una cosa y la contraria en la misma frase, e insultar gravemente a aquel que ose llevarles la contraria en cualquiera de los dos argumentos. Lo llevamos viendo y sufriendo años, pero lo de estos tiempos está siendo una especie de colmo que da entre risa y pena.

Durante años, muchos años, algunos hemos dicho que para poder vender el Valencia, primero se tenía que poner en valor, y que eso generaría el interés de posibles compradores. Y que si ese proceso no se daba, sería imposible. Y uno de los puntos clave era poner en marcha el Nuevo Mestalla y terminarlo, claro, porque eso es una parte esencial por todas las derivadas que tiene la finalización del futuro campo del Valencia. Nos guste o no.

Y después de recibir todo tipo de burradas, del entorno y también de algunos sectores de la opinión pública, nos encontramos con que ahora sí, ahora que lo dicen ellos, que se deben haber caído de la cama, ya no es de meritoners, vendidos o colaboracionistas, sino que es el proceso natural de las cosas. Lo que me pide el cuerpo es mandarles a todos a ese sitio en el que han puesto columpios, pero el bien del Valencia está muy por encima de todo esto.