Muchos deberes para el Valencia en el parón de Liga
Lo digo antes de que se dé, porque hacerlo después igual ya no es tan evidente, y seguro que el oportunismo sale a relucir
El Valencia tiene mucho trabajo de cara al parón liguero, muchísimo, y sí, alguno me dirá que si no ganamos al Espanyol, la primera tarea sería la de buscar entrenador. Yo no lo tengo tan claro, pero no soy adivino ni el máximo accionista, con lo que en ese juego no pienso entrar por muchas cosas. Lo que sí tengo claro, sea Baraja o cualquier otro, es que el equipo no puede ser el mismo el 1 de enero, y digo el 1, que ahora, porque en ese caso ya estamos sentenciados.
Porque podemos cambiar mil cosas, pero si no refuerza la plantilla, si no se hace el trabajo que no fuimos capaces de ejecutar en verano, ya hemos visto cómo están las cosas. No sé si son 3, 4 o media docena de jugadores, pero no podemos ser los mismos, de ninguna manera, porque no nos está dando, porque los rivales son mejores que nosotros y porque no podemos permitirnos el lujo de bajar a Segunda División, que es ahora mismo el riesgo.
En este parón se debe dejar clara la hoja de ruta de enero, porque se puede y se tiene que trabajar ya, y no esperar a que cierre otra vez el mercado, porque eso son jornadas que pasan, puntos que vuelan, días de trabajo que no vuelven, y eso es ahora mismo un crimen para nosotros. Sólo espero que todos estemos centrados en lo que hay, en lo que tenemos delante, y que nadie piense que los niños vienen de París, como tantas veces.