No entender lo que significa el Nuevo Mestalla para el Valencia es un problema

El futuro del Valencia es el Nuevo Mestalla, o estamos condenados. No sé si diciéndolo así se va a entender mejor, o al contrario, va a pasar que se tome al revés y se sea más contrario aún al estadio, que yo ya no sé qué pensar de todas estas cosas para no volverme loco. Creo que no se llega a atisbar todo lo que significa el cambio de casa, y por ende, dejar la que tenemos ahora. Y lo digo con el corazón encogido, porque no conozco más campo que Mestalla, allí m ha llevado mi padre y allí he llevado a mi hija.

Pero el futuro, el progreso, por usar un término quizá antiguo pero que expresa de forma fidedigna la realidad, pasa por ahí. Y no, los cambios a mí me gustan más bien poco, y mira que he tenido en mi vida para dar y tomar, pero esta no es por gusto, es por absoluta necesidad. Hay que ir a un sitio donde puedas facturar mucho más, hay que vender las parcelas del actual Mestalla para rebajar de forma sustancial los 297 millones de euros de deuda neta, y hay que equipararse a todos aquellos clubes que ya tienen en marcha este, llamémosle así, plan económico.

“Es que Meriton no ha movido un dedo”. Y sin el dinero de CVC seguiría sin hacerlo, ¿y? Que no son ellos, que somos nosotros, el Valencia, y no firman ellos el convenio, lo firmamos nosotros, ya está bien. Podemos regocijarnos en nuestra desgracia o afrontar las cosas como son, eso ya es decisión de cada uno. Y sobre todo, respetemos al que no piensa igual que nosotros.