Un desierto sin precedentes en el Valencia

Más allá del resultado el partido ante el Aston Villa demostró lo que muchos ya tenían asumido, a este Valencia no le llega al mínimo para competir y si no se producen varios fichajes el equipo lo va a pasar muy mal durante la temporada. Un equipo con muy pocos futbolistas experimentados, sin estrellas, cargado de promesas y de otros jóvenes sin el nivel suficiente. A pesar de que Meriton tiene un palmarés alargado de despropósitos, es difícil de recordar un inicio de liga con tan pocas perspectivas como las actuales.

El Valencia fue debilitándose año a año y en el verano de 2019 todo estalló.La pandemia hizo daño a la economía del club y en el siguiente mercado se produjo la gran desbandada, pero ni siquiera entonces (con Gracia en el banquillo) el Valencia presentó una plantilla tan debilitada. Salieron jugadores pero al menos se mantuvo una pequeña base del Valencia de Champions de anteriores campañas. Ahora la situación es mucho peor por varios aspectos.

El primero es que se viene de estar muy cerca del descenso; un aviso que debería haber hecho reflexionar a la propiedad. Pero no se han acometido operaciones importantes y examinar a los efectivos con los que cuenta Baraja produce entre indignación y vergüenza en la afición. Baraja lo da todo y los jugadores lo intentan, pero ni hay contundencia en las áreas ni presencia en el campo. Hay que reforzar al equipo y hacerlo cuanto antes, estamos ante un desierto sin precedentes.