Los despropósitos que han llevado al Valencia a la zona de descenso

Al Valencia le restan pocas semanas para evitar el descenso, el miedo se ha apoderado de la afición y la plantilla no es ajena a ello. Demasiados despropósitos y condicionantes han provocado que el equipo está al borde del colapso.

Sin fichajes de invierno

Se puede discutir sobre la planificación del pasado verano, sin embargo no admite justificación la ausencia de refuerzos en el mercado invernal. Corona afirmó que el equipo tenía mimbres para no sufrir, en la práctica volvió a ser Peter Lim el que no dio el OK para fichar y terminó enterrando al equipo a pesar de que las carencias eran evidentes.

Confianzas

La plantilla ha visto las orejas al lobo demasiado tarde. Los errores no se han corregido y ahora todo es ansiedad cargada de prisas; se pensaba que un equipo como el Valencia no llegaría a verse en estos problemas y los jugadores siempre quedaron en segundo plano dentro del clima de guerra contra la propiedad.

Arbitrajes

No es la razón principal pero sin duda ha influido. El Valencia ha sufrido arbitrajes inentendibles y en ocasiones absolutamente intolerables, el club ha alzado la voz por mediación de Javier Solís aunque para muchos estas palabras llegan tarde.

Elección de los entrenadores

La salida de Bordalás no gustó a una gran parte de la afición, pero mucho peor fueron las elecciones posteriores. Gattuso llegó con una idea utópica de fútbol viendo el potencial de la plantilla, terminó estrellándose. En cuando a Baraja se ha tirado de sentimiento apostando por un símbolo que sin embargo, no tenía el suficiente bagaje para ocupar un banquillo como el del Valencia. Solo queda confiar y apoyar al Pipo pero de momento la imagen y los resultados del Valencia no permiten ser optimistas.